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Pekín (Agencia Fides) – En vista de la solemnidad litúrgica de San José, el 19 de marzo, la comunidad católica china del continente, que siempre le ha tenido una gran devoción, está preparando grandes celebraciones. No sólo el día de su fiesta, sino a lo largo del camino de fe de todo el año, los católicos chinos, siempre han tenido a San José como modelo, para imitar su espíritu de generosidad, de servicio y de dedicación incondicional al plan de Dios. Además el 16 de agosto de 1678 el Papa Inocencio XI, asigno a San José, el título de "Patrón de la Misión en China”.
Según la información recogida por la Agencia Fides, cada año en la solemnidad litúrgica del 19 de marzo, el Santuario dedicado a San José, ubicado en la provincia de Shan Dong, acoge desde varios días antes a numerosos grupos de peregrinos procedentes de toda China. Sobre todo en las parroquias dedicadas al Santo, los fieles que viven intensamente la Cuaresma en comunión con la Iglesia universal, también están viviendo el mes de marzo dedicado a San José, preparándose para la gran celebración con la oración, una novena, la adoración eucarística... Con ello pretenden honrar a San José, que es patrón de la Iglesia Universal y Patrón de la Misión en China.
En el mundo católico chino la ferviente devoción al esposo de la Virgen María y custodio del Niño Jesús tiene una larga tradición. Generosidad, humildad, dedicación incondicional, auténtico espíritu de servicio, pobreza, obediencia y castidad absoluta: todas estas virtudes que distinguen a S. José son particularmente actuales para los hombres de hoy, según el pensamiento de los católicos chinos. El cariño especial de los chinoa hacia San José lo testimonian muchas iglesias (la más conocida es la parroquia de San José que está situada en el centro de Pekín, que se remonta a la iglesia construida por los dos misioneros jesuitas, sucesores del P. Matteo Ricci, el p. Louis Buglio y el padre Gabriel de Magallanes.), desde el Santuario de Ping Yin Shan (en la provincia de Shan Dong), a las numerosas congregaciones religiosas masculinas y femeninas, desde las estructuras eclesiales (como los seminarios), a las instituciones de caridad (orfanatos, residencias de ancianos...) y las escuelas católicas que están dedicadas al santo y que llevan su nombre. Además, San José también es patrón de la "buena muerte", y este aspecto está muy en sintonía con la tradición china, siempre muy atenta a los aspectos espirituales que se refieren a la vida y la muerte. (NZ) (Agencia Fides 18/03/2011)
