PROBLEMAS Y TENSIONES

sábado, 19 junio 2004

• La cuestión del velo

Entre los problemas que plantea la integración musulmana en Francia, el más reciente es la polémica sobre el velo que las jóvenes practicantes quieren llevar también en clase. Y la polémica sobre el empleo del pañuelo islámico en las escuelas primarias y secundarias en Francia, ha tenido también repercusiones en el mundo árabe islámico. Han sido muchas, en efecto, las manifestaciones de protesta por las calles de Beirut, Amman, Damasco y en otras ciudades del Medio Oriente. Grupos compactos de personas se han manifestado contra la ley que prohíbe el empleo del velo en la nación europea. ¿Pero contribuye esta ley a mejorar la integración de los inmigrados árabe-musulmanes en la sociedad francesa? Entre los países europeos, Francia, y en cierta medida también Bélgica e Inglaterra, es el primero que se ha enfrentado con una numerosa población inmigrada. En particular del Norte África: argelinos, tunecinos, marroquíes, todos con una característica en común: la fe musulmana. Y el problema del velo (pañuelo islámico) que ha afectado a la República, se convertirá en el tema de actualidad en todo el mundo occidental en las próximas décadas por el continuo flujo y/o aumento demográfico de las poblaciones musulmanas. Sin embargo, esta ley ha buscado, de algún modo, el disciplinar un problema casi marginal, dejando abiertas muchas otras problemáticas sobre la integración. ¿Pasará el examen de la Corte europea de justicia la ley aprobada sobre el velo? Hay un precedente. En la Turquía laica, dónde estaba prohibido el chador, una estudiante universitaria, Leila Sahim, que quería llevar el velo, venció en 1998 el recurso a la Corte europea que acusaba a Ankara de atentado contra la libertad personal.

• Educación escolar

El problema de la educación comprende dos aspectos fundamentales: los programas escolares y la pertenencia a la comunidad. El héroe fundador de Francia es Carlo Martillo que venció en Poiters impidiendo que se extendiera el imperio musulmán. Otro héroe fundador es Juana de Arco. Un hijo de inmigrado que en casa siempre oye hablar de Islam y de conquistas islámicas, ¿podrá aceptar alguna vez que el mito fundador del País dónde vive es alguien hostil a su país de origen? A nivel de educación el problema es esquizofrénico: por una parte, el joven tiene que absorber el mito fundador del País donde ha nacido y vive, pero que está en contradicción con las tradiciones y la historia familiar de origen. ¿Cómo se sentirán los jóvenes estudiantes de BUP franceses de origen magrebí cuando en la escuela tengan que oír la historia del colonialismo al Norte de África o el mito de Napoleón Bonaparte que invadió Egipto? Muchos ejemplos de crónicas en los institutos franceses testimonian que los estudiantes ponen en tela de juicio y rechazan el programa escolar. Y lo mismo ocurre cuando se habla del conflicto árabe-israelí y de la cuestión hebrea. ¿Cómo solucionar el problema? ¿Con ordenanzas escolares e imposiciones o hay otro camino? Más todavía. Muchos jóvenes magrebíes rechazan la autoridad del maestro cuando es una mujer. No sólo. Si una joven que realiza actividades deportiva en la escuela se niega a ponerse en pantalones cortos o a descubrir los brazos para jugar al voleibol o bien los padres le prohíben ir de excursión escolar porque se mezclaría demasiado con los chicos, ¿cómo tendrían que tratarla los profesores? ¿La dejan aumentando su marginación escolar? ¿Se puede intervenir? Sin hacer una cruzada, merece la pena trabajar para facilitar la integración. Otro problema: la educación sexual.

• Alimento

Parecería un problema relativamente simple y de fácil solución. En los comedores escolares, quién no quiere no come carne de cerdo o embutidos. Es un compromiso. Pero si el estado es laico ¿por qué tiene que respetar la sensibilidad de una religión? Para los musulmanes, la carne tiene que ser descuartizada de un cierto modo, llamado halala, o sea, el animal debe ser degollado y desangrado. Por ello, se han hecho también acuerdos precisos en los mataderos municipales con la aprobación de la Liga para la protección de animales. Un gup cultural a llenar para lograr mediar entre quien lucha por impedir la experimentación de fármacos con animales y quién solamente come carne halal.. En las Pirámides, un centro comercial de París, dos inmigrados musulmanes han realzado un gran supermercado donde no se vende carne de cerdo ni alcohol. ¿Cómo solucionar la cuestión? ¿El Estado se tiene que imponer o los clientes de ese centro deben adecuarse?



• Poligamia

Para la ley laica de la República, la poligamia no es admitida. Pero si un inmigrado que trabaja en Francia con su familia, se casa por segunda vez en su país de origen, por la ley sobre la unión familiar, puede también traer su segunda familia. Pero los ciudadanos de la República no tienen el mismo derecho. Por tanto, se hacen distinciones sobre base religiosa, aceptando de hecho la poligamia.

• Cementerios y culto de la muerte

Según la tradición islámica el muerto es enterrado el mismo día de la muerte, antes de la caída del sol, en cambio según las leyes europeas hay que esperar siempre 24 horas antes de proceder a la sepultura. ¿Cómo se concilian?

• Condición femenina

En Occidente el corte está prohibido por ley. Es más. Es un crimen regulado por el código penal. ¿Si una familia magrebí lleva a la niña a uno de los Países de origen y allí se realiza la infibulación, al regreso a Francia ¿la ley puede perseguir al padre? Otro problema. Si una mujer está sangrando llega el ginecólogo hombre y ella, siguiendo los dictámenes del Islam, no se deja tocar, ¿que hacer? ¿Dejarla morir para afirmar la laicidad del estado?

• Trabajo, días de fiesta

Si en una gran fábrica los inmigrados, más numerosos, porque quizá los franceses ya no quieren hacer ese tipo de trabajo, piden durante el horario de trabajo tiempo para la oración y lugares para el culto, o bien piden trabajar el domingo y descansar el viernes, ¿se les puede contentar, o por principio, no? Más todavía. Si una fábrica en dificultades económicas tiene que hacer una conversión industrial, haciendo una actividad contraria a los principios del Islam (por ejemplo pasa de una actividad de enlatar tomates a la venta de licores, o bien de la venta de carne de novillo a la de cerdo) ¿qué sucede? ¿Se abre un contencioso sin fin porque los trabajadores inmigrados musulmanes no quieren tocar carne de cerdo? Si piden el mes de vacaciones durante el Ramadán, ¿que puede ocurrir en un cualquier período del año?

• Cambio urbano de las ciudades

Este es uno de los aspectos menos conocidos y menos tratados, tan solo por pocos especialistas de urbanismo, pero destinado a crear muchos problemas que podrían desencadenar en las imaginarios colectivos fantasmas del pasado (batalla de Lepanto, saqueo de Roma). Es verosímil pensar que los musulmanes quieran tener cada vez más mezquitas para su culto. Y la arquitectura de una mezquita tiene características precisas con altos alminares. ¿Mezquitas junto a iglesias y catedrales? ¿Como reaccionarán los franceses ante un alminar más alto que la histórica catedral? ¿Estarán preparados para acoger estos cambios o bien los ciudadanos inmigrados tendrán que conformarse con lugares periféricos - como ahora - para no cambiar el aspecto urbanístico e histórico de la ciudad?

• La disciplina del culto

Con la constitución de la Consulta francesa del culto musulmán (Cfcm), la República tiene por primera vez un intermediario oficial que regula el culto. También el ministro Pisanu está intentando lanzar un organismo similar en Italia.


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