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Bissau (Agencia Fides)- Parece que la tranquilidad volvió a Bissau, capital de Guinea Bissau, donde ayer, 2 de marzo, fue asesinado el Presidente Vieira por un grupo de militares que lo consideraban responsable del asesinato del Jefe de Estado Mayor, el general Batista Tagmé Na Waié (ver Fides 2/3/2009).
Mientras las calles aún son patrulladas por soldados listos para el combate, el comando militar emitió un comunicado en el que afirma que el asesinato del Jefe de Estado ha sido un acto de un “aislado grupo de militares” y que las fuerzas armadas se mantienen leales a las instituciones democráticas negando todo tipo de tentación golpista.
El Primer Ministro Carlos Gomes Junior, elogió “el acto de patriotismo de los militares que no han tomado el poder” durante las dramáticas horas del asedio a la residencia del Presidente. Las autoridades civiles y militares declararon que el grupo de soldados responsables del asesinato de Vieira será perseguido penalmente, si bien hasta el momento no se ha tenido noticia de los arrestos.
Según la Constitución, el Presidente del Parlamento, Raimundo Pereira, asumirá las funciones de Jefe de Estado ad interim a la espera de las nuevas elecciones.
Mientras tanto surgen nuevos particulares sobre la muerte del Presidente. Los militares que lo asesinaron partieron de la base de Mansoa (60 km de Bissau), en la noche del domingo 1º de marzo, inmediatamente de que fuera difundida la noticia del asesinato del general Tagmé Na Waié. El grupo de militares, casi una docena, se dirigió primero hacia la prisión judiciaria de Bissau, donde liberó a algunos de sus miembros acusados por un precedente asalto a la residencia del Presidente, y después se dirigieron a la habitación del Jefe de Estado. Este, tras lograr poner a salvo a la esposa (que encontró refugio en la Embajada de Angola), intentó huir pero fue alcanzado por los soldados que lo golpearon salvajemente y lo asesinaron con golpes de Kalashnikov.
La muerte de Vieira fue condenada por la comunidad internacional. El Consejo de Paz y Seguridad de la Unión Africana se reunió en sesión extraordinaria en Addis Abeba (Etiopía) para discutir sobre la crisis en Guinea Bissau, la última que afecta a un país del África occidental tras el golpe en Guinea Conakry (diciembre del 2008) y en Mauritania.
Crece también la preocupación por la presencia de organizaciones de narcotraficantes en Guinea Bissau y en toda el área. Según algunos comentadores es significativo que por el homicidio del Jefe de Estado Mayor (el evento que desencadenó la crisis) se haya utilizado un mecanismo explosivo. Se trata del primer episodio del tipo en África occidental: por lo general, generales y presidentes son asesinados con ametralladoras (como con Vieira). El uso de bombas ha sido más bien común en las guerras entre narcotraficantes en Colombia. Los mismos que recorren las calles de las ciudades del África occidental en exageradas todo terreno con la impunidad asegurada por el dinero y la violencia. (L.M.) (Agencia Fides 3/2/2009; líneas 37, palabras 504)
