AFRICA/BURUNDI - El Centro de rehabilitación para niños sordos de Gitega: Desde hace 26 años trabaja en la sensibilización de los padres y ayuda a los muchachos a conseguir un titulo de estudio y a inserirse en el mundo del trabajo

Gitega (Agencia Fides) – El “Centre pour Déficients Auditifs” es desde hace 26 años un polo de formación de calidad para no oyentes en Gitega. En 1977 Mons. Pierre Canisius Batembekeza, en ese entonces responsable diocesano de educación, se mostró favorable al proyecto y en 1982 la Arquidiócesis decidió fundar el Centro con la ayuda de algunos voluntarios, ofreciendo hospedaje a una decena de niños. Eran tres los objetivos del centro: rehabilitar y reeducar en la palabra y la comunicación; permitirles una educación equivalente a las escuelas públicas y garantizarles un diploma profesional ayudándolos a inserirse en el mundo del trabajo. En la actualidad 215 jóvenes provenientes de todo el país frecuentan el instituto y se benefician del mismo programa educativo vigente en las escuelas públicas, pero que dura el doble. Un buen número de diplomados, cuando desean continuar los estudios, logra acceder a las escuelas superiores y a la Universidad.
Uno de los sucesos más importantes del Centro diocesano es sin duda el lograr que los padres vivan con confianza la discapacidad de sus hijos y que ayuden a difundir a nivel cultural una mayor atención hacía los niños con problemas auditivos, a los que con frecuencias les faltan profesores calificados y una ayuda adecuada. El mismo instituto diocesano, a pesar de los sucesos, logra obtener con mucha dificultad los subsidios gobernativos necesarios para garantizarles a los profesores las mismas condiciones que obtendrían en el sector público. Los 25 años de la fundación, celebrados en el 2007, fueron recordados por el Vicario General de Gitega, Mons. Pierre Canisius Batembekeza, como “un don del Señor que nos invita a cada uno a vivir un amor desinteresado sobre todo a favor de las personas vulnerables como los sordos. La Palabra de Jesucristo tiene el poder de liberar a los prisioneros, de dar la vista a los ciegos y la palabra a los sordos. Dios no tiene otro proyecto sino la salud de las personas humanas”. Además Mons. Batembekeza aseguró a todos los educadores de los cursos de perfeccionamiento el compromiso por ampliar la oferta formativa del instituto. (A.M) (Agencia Fides 24/10/2008 líneas 27 palabras 386)