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New Delhi (Agencia Fides) – El 13 de octubre se reunió el Consejo Nacional para la Integración con el fin de llamar la atención de todos, especialmente de las minorías culturales y religiosas presentes en India, sobre la cuestión de la irracional violencia intercomunitaria y de los ataques premeditados contra los cristianos. Este organismo esta formado por representantes de la política, de la sociedad civil y de las comunidades religiosas y fue creado para tratar el delicado tema de los conflictos y la violencia en la sociedad india.
El Consejo, que no se reunía hace tres años, ha sido reconvocado para examinar a fondo el preocupante fenómeno de la violencia anticristiana y ha vuelto a poner sobre la mesa la propuesta de un “Communal Violence Bill”, es decir la implementación de una ley ad hoc para detener la campaña de ataques violentos que tiene como objetivo las comunidades religiosas.
En representación de la Iglesia católica participaron en los trabajos del Consejo el Arzobispo de Delhi, Mons. Vincent Concessao, y otros líderes laicos de organizaciones cristianas que están informando a la opinión pública y defendiendo a los fieles. Junto a ellos algunos líderes de organizaciones para los derechos humanos, representantes de movimiento y partitos así como líderes de otras comunidades religiosas.
El Consejo ha puesto en evidencia una vez más la absurda campaña de “eliminación programada” contra las comunidades cristianas, iniciada en Orissa y que se ha extendido a 12 estados de la Federación, y reafirmando la necesidad de que todos los miembros de la sociedad civil, de la cultura y de las religiones, mayoritarias y minoritarias, contribuyan en la construcción de una India armoniosa, pluralista, laica y democrática.
Se ha pedido además una mayor coordinación entre las autoridades federales y las de cada estado indio para prevenir mejor la violencia y para perseguir a los culpables También se hizo un llamado a la solidariedad y al compromiso de todas las minorías religiosas presentes en la India junto a los cristianos, ya que todos deben participar del compromiso de convivencia civil en el país.
La Iglesia Católica a llamado la atención en particular sobre la voluntad de continuar el proceso de alfabetización, de instrucción y de promoción socio-económica de los sin casta, de los dalit, de los pobres y de los marginados. Dicho compromiso ha sido muchas veces criticado por los líderes hindúes de los movimientos radicales.
Al final de la sesión el Consejo confirmó algunos pedidos específicos, compartidos por todos los presentes: detener la campaña de odio ideológico que prepara la violencia; perseguir a los autores de los crímenes según las leyes vigentes; aprobar el “Communal Violence Bill”, ley que bloquea específicamente la agresión a las minorías; garantizar a las minorías culturales y religiosas igualad de oportunidades y mayor representabilidad dentro la Administración pública, la Policía y el sistema judicial; reformar en sentido democrático, de manera profunda y global, el sistema educativo nacional, garantizando una instrucción adecuada también entre las clases menos favorecidas. (PA) (Agencia Fides 15/10/2008 líneas 40 palabras 528)
