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Roma (Agencia Fides)- Se mantiene alta la tensión en la frontera entre Eritrea y Gibuti, donde en junio los enfrentamientos entre militares de ambos países provocaron más de 35 muertos y decenas de heridos (ver Fides 12/6/2008). Es cuanto ha sido afirmado por la misión de las Naciones Unidas encargada de evaluar la situación en el área.
A inicios de junio iniciaron graves enfrentamientos entre las fuerzas armadas de Gibuti y las eritreas a lo largo de la frontera disputada por ambos países, en una zona conocida como Doumeira. Los enfrentamientos iniciaron después de varias semanas de crecientes tensiones entre ambas partes y tras el refuerzo militar de los respectivos ejércitos.
La misión de la ONU afirmó también que Eritrea ha rechazado el recibirla, y consecuentemente ha podido solamente examinar la versión de los eventos que tiene el gobierno de Gibuti.
“Si la divergencia entre Gibuti y Eritrea no es contrastada en modo inmediato y completo se podría manifestar un fuerte impacto negativo en toda la región y en la comunidad internacional”, afirma la relación. Los expertos de la ONU afirmaron que en Gibuti se está realizando una costosa movilización militar para afrontar una situación que amenaza la paz de la región.
“La eventual desestabilización de Gibuti y la militarización del Estrecho de Bab el-Mandeb (que comunica el Mar Rojo con el Golfo de Aden y es punto de tránsito estratégico de y hacia el Mediterráneo) no son un buen presagio para la paz en la región y para el tráfico marítimo internacional. Por lo tanto es necesario encontrar soluciones, pues se trata de una cuestión de prioridad máxima”.
Las Naciones Unidas deberían convencer a Eritrea y Gibuti a desmilitarizar el confín y volver al “status quo ante, como en febrero”, afirma el reporte.
Los expertos de la ONU también destacaron la necesidad, para ambas partes, sobre ponerse de acuerdo para definir que tratados y protocolos del periodo colonial deberían ser aceptados como base para definir su frontera común: el tratado entre Abisinia y Francia de 1987, los protocoles del 1900-1901 entre Francia e Italia, o el tratado ítalo francés de 1935.
“Es trágico que los dos países estén al punto de declarse la guerra por tratados y protocolos que han sido firmados cuando aún no existían como estados independientes”, concluye el reporte. (L.M.) (Agencia Fides 19/9/2008 líneas 29 palabras 401)
