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Managua (Agencia Fides) – Los Obispos de Nicaragua, actualmente en el Vaticano con motivo de la visita Ad Limina Apostolorum, publicaron una Carta Pastoral en el mes de agosto ante las actuales circunstancias del país y las próximas elecciones municipales que tendrán lugar el 9 de noviembre.
En la primera parte de la Carta los Obispos destacan algunas luces y sombras de la situación actual. Entre las luces señalan “la superación de la dramática crisis energética que sumía al país en una oscuridad que lo paralizaba hasta por más de 8 horas diariamente”; los esfuerzos por llegar a los pequeños productores brindándoles todo tipo de asistencia; esfuerzos por mejorar la educación así como los centros de salud pública y la gratuidad de estos servicios básicos de salud, además de mejoras notables en la red vial del país.
Pero junto a estas luces persisten ciertas sombras como es la pobreza extrema y hambre, “originada en parte por el alza mundial del precio del petróleo, el deslizamiento de la moneda, el crecimiento desmedido del valor de la canasta básica, las catástrofes y el todavía insuficiente salario mínimo”. Esto provoca además otros problemas como la violencia intrafamiliar, abandono de los estudios, delincuencia creciente, migración forzada, inseguridad ciudadana, narcotráfico y hasta conflictos armados. También preocupa a los Obispos la migración forzada “sabiendo que las medidas internacionales ahora se están restringiendo, al punto de llegar a ser injustas en algunos países pues ven al emigrante como un delincuente”. Otra sombra del país es la falta de transparencia en el manejo y distribución de algunas ayudas venidas de otros países así como la indiferencia cívica ciudadana que se manifiesta de una manera clara en una falta de interés por las elecciones y la participación en otras actividades de la vida pública. Además crece la frustración política en la ciudadanía y “se va deteriorando la estabilidad social y económica del país debido a que algunos de los que participan en la vida pública, frecuentemente están utilizando un lenguaje descalificador, violento y confrontativo”
Respecto a las próximas elecciones los Prelados recuerdan que todo ciudadano tiene derecho a elegir y ser elegido y por tanto, “se faltaría a nuestra responsabilidad ciudadana si nos mantenemos al margen en el ejercicio de este derecho, dejando en manos de un solo sector el decidir sobre el rumbo de nuestros gobiernos municipales”. Por ello afirman que “aunque ocasionalmente en el ambiente social se perciben dudas sobre la transparencia en el proceso electoral, el ciudadano debería persistir con su voto”. Y realizan un llamamiento “al sentido de responsabilidad de los laicos para que estén presentes en la vida pública, y más en concreto en la formación de los consensos necesarios y en la oposición contra las injusticias”.
Así mismo piden que se trabaje por conseguir “un ambiente que supere el temor al fraude, la apatía provocada, el fanatismo partidista, la inestabilidad, la desilusión ciudadana, el chantaje, la represión y otros factores que podrían repercutir negativamente a la hora de votar”. “Participar en las elecciones – continua el texto - no sólo es un derecho que como ciudadanos nicaragüenses poseemos, es también una obligación con nuestro municipio y con la nación. No votar es ya elegir, es conformarse con aquellos que nos impongan. Evadir la responsabilidad del voto es renunciar a la posibilidad de participar en el desarrollo de nuestros municipios”.
Realizan a continuación un llamamiento a las instituciones a respetar la ley pues “lamentablemente ha surgido un clima de desconfianza e incredulidad frente a la institución llamada a ejecutar esta ley electoral, lo que suscita sospecha en un sector de los participantes y sociedad en general”. Así mismo piden no sucumbir las tentadoras propuestas para doblegar las voluntades y manipular las elecciones.
Por último exhortan a los medios de comunicación ser fieles a la verdad, objetividad y el profesionalismo. “Cuando los medios de comunicación manejan la verdad, el profesionalismo y la objetividad, se convierten en la conciencia de la nación, lo cual implica fidelidad y perseverancia a pesar de posibles determinaciones que atenten contra la libertad de expresión” concluye el texto. (RG) (Agencia Fides 8/9/2008)
