AFRICA/SUDÁFRICA - “¡No a la violencia! ¡No a la xenofobia!”, afirman los Obispos de Mozambique en un mensaje en el que piden evitar las represalias por la violencia contra los inmigrantes en Sudáfrica

Maputo (Agencia Fides) – “Como Pastores de la Iglesia local de nuestro país queremos manifestar nuestra profunda preocupación por la situación de las hermanas y hermanos de Mozambique residentes en el vecino país de Sudáfrica”, afirman los Obispos de Mozambique en un mensaje de condena de la violencia xenófoba que ha golpeado a la comunidad de inmigrantes en Sudáfrica, entre los cuales hay numerosos mozambiqueños.
“En la serie de actos de barbarie e intolerancia perpetrados por algunos grupos de ciudadanos sudafricanos, más de 40 mozambiqueños fueron linchados sin motivo y otros más de 30 mil fueron obligados a regresar de improviso a su país de origen, despojados de todos sus bienes, llevando consigo solamente el peso de sus sufrimientos morales y materiales”, recuerda el mensaje enviado a la Agencia Fides. “Estamos frente a actos de xenofobia que no toleran a quien es diferente, violando de esta manera el mandamiento del Señor de convivir pacíficamente unos con otros, en la igualdad y en la diversidad. Amad al extranjero, porque también vosotros fuisteis extranjeros en Egipto”.
“Al tratar de comprender el origen de esta ola de violencia vemos que, entre otras cosas, la situación parece deberse a un deterioramiento de las condiciones sociales, a la inicua distribución de la riqueza, a la explotación de la fuerza de trabajo a bajo costo de los extranjeros en desmedro del reclamo de trabajo y de un salario justo por parte de los mismos sudafricanos. Además, la riqueza generada en Sudáfrica, que no es poca, no parece estar distribuida equitativamente. El bienestar soñado por el pueblo sudafricano con el fin del apartheid todavía no es una realidad”, afirman los Obispos. “Creemos que la xenofobia y todas las formas de extremismo constituyen una grave ofensa a Dios, ya que violan la dignidad de la persona humana. Por este motivo, en este momento de dolor y de luto por el pueblo mozambiqueño, expresemos de corazón nuestra solidaridad a todos nuestros hermanos y hermanas víctimas de la xenofobia en la República Sudafricana. Oremos a Dios por el eterno descanso de las almas de nuestros hermanos muertos a causa de la ola de violencia y pidamos al Señor que brinde el consuelo a sus parientes y amigos. Nuestra solidaridad se extiende a todos los inmigrantes que en el vecino país de Sudáfrica sufren a causa de la violencia. Seamos también solidarios con todos aquellos que luchan y se esfuerzan tanto en Sudáfrica como en los países vecinos a nivel internacional, para que sean respetadas las leyes de una sana convivencia entre los seres humanos y se creen las condiciones de acogida y de respeto de la dignidad para todos aquellos que han sido afectados por la violencia”.
La Conferencia Episcopal de Mozambique expresa su aprecio por los esfuerzos efectuados por los gobiernos de los dos países por ayudar a las víctimas y agradece a la Iglesia sudafricana por la ayuda ofrecida: “agradecemos y pedimos a la Iglesia de Sudáfrica multiplicar los esfuerzos para continuar dando asistencia a los inmigrantes con todo el cuidado pastoral que necesiten”.
“Pedimos al amado pueblo mozambiqueño mantener la calma y evitar cualquier provocación y manifestación de violencia. ¡No a la xenofobia! ¡No a las represalias!”, concluyen los Obispos. (L.M.) (Agencia Fides 2/6/2008; líneas 35, palabras 532)