AFRICA/KENYA - “La firma del acuerdo es el final de una pesadilla. Espero que la coalición entre Kibaki y Odinga pueda hacer frente a las profundas causas de la división en el País”, dice a Fides el padre Eugenio Ferrari

Nairobi (Agencia Fides) - “Es el final de una pesadilla: gracias a Dios nuestras plegarias han sido escuchadas”, dice a la Agencia Fides el padre Eugenio Ferrari, misionero del Consuelo en Kenya, luego de la firma del acuerdo entre el Presidente Mwai Kibaki y el líder de la oposición Raila Odinga. “Ayer, apenas apareció la noticia sobre el acuerdo, la gente salió por las calles a bailar de alegría. Hoy, la gente no habla de otra cosa. Escucho con alegría y estupor a la gente, incluso a las personas más sencillas, discutir sobre el acuerdo, sobre la importancia de la paz y sobre la necesidad de reimpulsar el desarrollo del país. Me dicen: “Padre, con la paz podemos hora recomenzar el camino del desarrollo”, afirma el misionero y Director Nacional de las Pontificias Obras Misionales en Kenya.
“No puedo negar que estaba sumamente preocupado: si no hubiese llegado este acuerdo, y no lo digo solamente yo sino la gente en general, Kenya habría sido el escenario de una tragedia aún peor que la de Rwanda. La gente estaba ya prendiendo las armas, y no sólo el arco y la flecha sino también armas de fuego, con las Kalashnikov provenientes de los países vecinos”, prosigue el padre Ferrari. “La firma de este acuerdo es fruto de la tenacidad y la paciencia de Kofi Annan, mediador encargado por la comunidad internacional. El ex Secretario General de la ONU es una persona excepcional: no se ha dejado condicionar por las críticas y ha sabido aprovechar el momento para colocar a Kibaki y Odinga al frente de sus responsabilidades, al haber suspendido las negociaciones entre las delegaciones y haber obligado a los dos líderes a dialogar entre ellos”, afirma el misionero. “Ahora esperamos que el acuerdo sea respetado y aplicado de la manera correcta, sin interferencias por parte de ambos bandos. El nuevo gobierno de colación tendrá que afrontar las causas profundas de la crisis, en primer lugar la cuestión de la propiedad agraria que es el verdadero obstáculo para lograr la paz entre las etnias”, concluye el padre Ferrari.
El 28 de febrero, el Presidente Kibaki y el líder de la oposición Odinga, firmaron frente a las tele cámaras y la prensa un acuerdo que prevé la división de los poderes. Los principales puntos del acuerdo son: la creación del rol de Primer Ministro; los puestos ministeriales estarán divididos de manera que reflejen la fuerza parlamentaria de sus respectivos partidos, con los encargos más importantes divididos de manera balanceada entre las partes. Kibaki queda como Jefe de Estado mientras que Odinga ocuparía el cargo de Primer Ministro, con la responsabilidad de conducir los asuntos corrientes del gobierno. Además serán creados dos puestos de vice Premier, divididos entre mayoría y oposición. El Primer Ministros y sus dos vice Premiers pueden ser obligados a dimitir sólo en el caso de un voto parlamentario de desconfianza. Si el Presidente pretende despedir a un ministro lo podrá hacer sólo con el consentimiento escrito del Premier. La coalición será disuelta al término de la legislatura, en el 2012, o antes si se diese el consentimiento escrito de las partes, o si una de las partes se retira de la coalición. (L.M.) (Agencia Fides 28/2/2008; líneas 38, palabras 570)