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Rangún (Agencia Fides) - A pesar de las recientes tensiones sociales y las dificultades políticas, algunas organizaciones no gubernamentales católicas consiguen llevar ayudas humanitarias y llevar adelante obras de cooperación y solidaridad en Myanmar. El boicot comercial, o las sanciones económicas, no afectan a los proyectos aprobados y realizados en territorio birmano por la red de las Ong de todo el mundo, que se realizan a favor de la población civil, ocupándose de la instrucción y la asistencia a grupos más desfavorecidos como huérfanos, niños, viudas, ancianas, niños de la calle. Los proyectos están a menudo en colaboración con diócesis o misioneros presentes en Myanmar, que conocen las exigencias de la población local y logran así incidir en la sociedad.
En estos meses, a pesar de los desórdenes verificados sobretodo en las dos principales ciudades birmanas, Rangún y Mandalay, la labor de la Ong católica italiano Avsi (Asociación Voluntarios para el Servicio Internacional) no se ha visto afectada: ha continuada sin problemas la asistencia y el sostén a 300 niños de la diócesis de Pekhon, en la provincia del Shan. Gracias sobre todo a la ayuda a distancia, se consigue garantizar comida, medicinas e instrucción para más de 300 chicos atendidos en el lugar por algunos misioneros de órdenes religiosas que tienen una larga e importante experiencia en el país. La ayuda a distancia contribuye a sustentar la casa-colegio en el que están hospedados los niños más pobres y los que provienen de las más lejanas zonas de montaña, y que de otro modo se verían imposibilitados a acceder a los servicios educativos.
La red internacional de las ONGs activas en Myanmar desearía mayor sostén de los gobiernos para llevar adelante la obra humanitaria. Recientemente "Christian Solidarity Worldwide" (CSW), ONG con sede en Londres, ha expresado su desacuerdo porque su petición de aumentar las ayudas hacia la población birmana, sobre todo hacia los prófugos que han huido a Tailandia, asignada en las áreas fronterizas, no ha sido completamente satisfecha. La organización, recordando que "hace falta dar una esperanza a la población civil birmana que sufre hambre, pobreza y abusos de los derechos humanos", ha activado su campaña de sensibilización a nivel internacional, solicitando otros donantes. CSW trabaja desde hace años en la asistencia a los refugiados birmanos, sobre todo los pertenecientes a las minorías étnicas, considerados como rebeldes por el gobierno de Rangún, y por ello, subordinados a la represión del ejército birmano. (PA) (Agencia Fides 24/10/2007 Líneas: 31 Palabras: 424)
