Organo de informacion de las Obras Misionales Pontificias desde 1927
Madrid (Agencia Fides) - Los Obispos de España se han vuelto a pronunciar sobre la Ley Orgánica de Educación (LOE) al termino de la reunión de la Comisión Permanente de la Conferencia Episcopal Española (CEE) celebrada del 19 al 21 de junio. En efecto el pasado 28 de febrero la comisión Permanente hizo pública una Declaración titulada “La Ley Orgánica de Educación (LOE), los Reales Decretos que la desarrollan y los derechos fundamentales de padres y escuelas” en el que explicaban como la nueva legislación no regula la enseñanza de la Religión de modo que queden a salvo los derechos de todos y vulnera los derechos que asisten a los padres en la educación de sus hijos (ver Fides 2/3/2007). Sin embargo, en estos momentos debido a acontecimientos recientes los Obispos han considerado oportuno hablar nuevamente sobre algunos asuntos, en concreto, sobre el nuevo estatuto laboral de los profesores de Religión y sobre la asignatura de nueva implantación llamada “Educación para la ciudadanía”.
Respecto a la primera cuestión los Obispos consideran que el Real Decreto regulador de la relación laboral de los profesores de religión, publicado el pasado 9 de junio, “no cumple el Acuerdo sobre Enseñanza entre el estado Español y la Santa Sede, por el que se hace efectivo para los católicos en este campo el derecho de libertad religiosa reconocido de modo genérico por la Constitución Española, y no se ajusta a la jurisprudencia establecida al respecto el Tribunal Supremo y por el Tribunal Constitucional”. Por ello, los prelados señalan que “no podemos excluir que sea necesario ejercer las acciones legales oportunas para que sea respetado el ordenamiento jurídico vigente, que tutela los derechos de todos”.
Respecto a la nueva asignatura de “Educación para la ciudadanía”, cuyo objetivo es la formación de la conciencia moral de los alumnos, los Obispos recuerdan una vez más que esta “implica una lesión grave del derecho originario e inalienable de los padres y de la escuela, en colaboración con ellos, a elegir la formación moral que deseen para sus hijos”. Según los Obispos si esta asignatura “no hubiera invadido el campo de la formación de la conciencia y se hubiera atenido, por ejemplo, a la explicación del ordenamiento constitucional y de las declaraciones universales de los derechos humanos, hubiera sido aceptable e incluso, tal vez, deseable”. Además esta asignatura está causando una creciente preocupación entre los padres de alumnos y ha puesto en dificultades a los centros educativos ya que “los centros católicos o inspirados en la doctrina católica se verían obligados por la Ley a introducir en su programación una asignatura que no resulta coherente con su ideario” y “los centros educativos del Estado, perdiendo su obligada neutralidad ideológica, impondrán a quienes han optado por la religión y moral católica otra formación moral no elegida por ellos”. De este modo, continua el texto “todos los alumnos, católicos o no, quedan afectados en sus derechos, ya que a ninguno se le puede imponer una formación moral no elegida por él o por sus padres”.
Ante esta situación la Comisión Permanente de la CEE exhortan a todos a “actuar de modo responsable y comprometido ante una asignatura inaceptable tanto en la forma como en el fondo”, pues “la gravedad de la situación no permite posturas pasivas ni acomodaticias”. Recuerdan que los medios concretos son diversos pudiendo recurrir “a todos los medios legítimos para defender la libertad de conciencia y de enseñanza, que es lo que está en juego”.
“Cuando está en cuestión un derecho tan fundamental, como el de la libertad de conciencia y de enseñanza, todos -y los católicos, en particular- debemos mostrarnos unidos en su defensa”, concluyen los Obispos. (RG) (Agencia Fides 22/6/2007 Líneas: 47 Palabras: 652)
