VATICANO - “La Biblia en las culturas de los pueblos”: Convenio internacional en la Pontificia Universidad Urbaniana

viernes, 11 mayo 2007

Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) - “Me parece verdaderamente oportuno que vuestra facultada haya optado por reflexionar sobre la “Biblia en las culturas de los pueblos”, para mostrar la riqueza del texto sagrado en el encuentro con diversas culturas, sobre todo pocos días después de la presentación de las Directivas de la próxima Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos. Habéis sido tempestivos y habéis captado una exigencia de nuestra Iglesia frente a los cambios epocales a los que asistimos: regresar a la fuentes de nuestra fe, es decir a aquella Palabra de Dios de la que la Biblia es parte esencial y originante”. Con estas palabras Su Eminencia el Cardenal Iván Dias, Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, Gran Canciller de la Pontificia Universidad Urbaniana, abrió el Convenio “La Biblia en las culturas de los pueblos - Hermenéutica y comunicación” que se desarrolla en la Pontificia Universidad Urbaniana el 10 y el 11 de mayo, promovido por la facultad de Teología.
“Estoy convencido -dijo el Card. Dias resaltando la fuerte unión existente entre la Palabra de Dios y la historia del hombre- que en este convenio, a través de los diversos contributos, buscaréis sondear esta relación entre fe y cultura para ofrecerla al debate y a la reflexión no solamente en la universidad urbaniana o en las otras universidades romanas, sino de toda la Iglesia y de aquellos que buscan comprender, incluso perteneciendo a otras religiones o no creyentes, el valor de un texto sagrado que nadie puede negar ha marcado en varios aspectos la historia de una gran parte de la humanidad”.
“Ningún otro libro como la Biblia se ha relacionado tan fuertemente y ampliamente con las diferentes culturas al punto de inspirar los más variados campos del saber, desde el filosófico al del arte y de la literatura, y también la cultura popular” afirmó mons. Ambrogio Spreafico, Rector Magnífico de la Pontificia Universidad Urbaniana, en la relación de apertura del Congreso. “Naturalmente sondear en todos sus aspectos este proceso, que hoy se llamaría de inculturación, resulta una empresa imposible - precisó Mons. Spreafico-. Se podría decir que las intervenciones que escucharemos son degustaciones de un patrimonio inmenso. Basta pensar que la Biblia, o libros a esta estrechamente ligados, como los catecismos, ha sido para algunas expresiones culturales entre los primeros testimonios de la literatura escrita”.
La Biblia nunca ha dejado de interactuar con el pensamiento y las culturas, “incluso si hoy esta relación parece más difícil y compleja. El pensamiento débil, al menos en una de sus versiones, parece haber puesto en discusión la posibilidad del hombre de elaborar una síntesis eficaz y planteable entre razón y fe, entre Biblia y cultura”. Recordando como el Concilio Vaticano II dio “un impulso determinante al desarrollo del conocimiento, de la difusión y de la investigación bíblica en todos los ámbitos, desde el de la escuela hasta el más popular”, el Rector de la Universidad Urbaniana afirmó: “Hoy, según las estadísticas de la Sociedad Bíblica, se cuentan traducciones al menos parciales del texto sacro en 2426 lenguas. La Sociedad Bíblica ha estado a cargo, solo en Europa, de la traducción de 47 Biblias, casi todas con las Iglesia Católica tras el Vaticano II. Las mayores traducciones ecuménicas de la Biblia en las principales lenguas han sido producidas después del Concilio. Y siempre son mayores las intenciones de este tipo. Han nacido centros de investigación especializada en los varios sectores. Revistas y comentarios al Antiguo Testamento y al Nuevo Testamento se han multiplicado. La Biblia comenzaba a ser leída y amada también por el pueblo, y no solo por pocos cultores, incluso si este pasaje es aún limitado. Esta es, a mi parecer, la verdadera novedad del siglo pasado, que ha impulsado a la Biblia fuera de la escuela hacia la gente”.
En la parte conclusiva de su relación, Mons. Spreafico, propuso algunas temáticas actuales a las que el Convenio tratará de responder: el problema de una hermenéutica global del texto; el resultado de una reciente investigación según la cual el 80% de los católicos europeos que frecuentan habitualmente la Santa Misa los domingos se encuentra con la Biblia solo en la liturgia festiva; la Biblia no ha llegado a ser libro de oración y meditación; la relación entre la Biblia y la vida; la relación entre arquitectura religiosa y arte pictórica. (S.L.) (Agencia Fides 11/5/2007; líneas 53 palabras 736)


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