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Asmara (Agencia Fides) – “Intervengan para salvar la vida de los 18 soldados que aún se encuentran en Etiopía y de otros que se esconden a lo largo de la frontera eritrea con el país en guerra” es el último llamamiento lanzado a las Naciones Unidas y a las organizaciones internacionales por el Eritrean Afar National Congress (EANC).
Las noticias siguen siendo confusas e imprecisas debido al bloqueo de las comunicaciones. La información que se puede reunir sugiere que se trata de una de las mayores tragedias humanitarias del planeta.
Según los informes, la organización emitió hace unos días un comunicado en el que afirmaba que 500 soldados eritreos de Afar habían desertado del ejército eritreo y que tres generales eritreos habían sido enviados para capturarlos y repatriarlos al país. A su llegada a Bada-Admorug, en Etiopía, en dos helicópteros, los tres generales, incluido el oficial de la marina Humad Karikare, se reunieron con 54 de las tropas que habían entrado en territorio etíope. Todavía se informa de que 36 de ellos fueron repatriados por la fuerza a Eritrea. No se pudo confirmar la ubicación de las 18 tropas restantes. La fuente sobre el terreno añade que estas tropas corren un grave riesgo de ser secuestradas. También preocupa que la exitosa repatriación forzada de 36 desertores por parte del ejército eritreo pueda animar al régimen a realizar más secuestros transfronterizos en Afar y otros lugares.
La región etíope de Afar acoge a más de 50.000 refugiados eritreos registrados por la ONU que han huido de su país. En la reciente guerra entre Etiopía y Tigray, el campo de refugiados eritreos de Barahle ha sido destruido, dejando a miles de refugiados internamente desplazados.
La EANC, la Voz del Pueblo Eritreo Afar, es una organización política en el exilio dedicada a la autodeterminación y el autogobierno del pueblo afar eritreo en la zona de Dankalia de Eritrea.
Recientemente, el ejército regular eritreo bombardeó la ciudad de Shiraro, de etnia kunama, alcanzando una escuela que albergaba a refugiados. Al menos 18 personas resultaron heridas y una niña de 14 años murió. El bombardeo puede haber sido una respuesta a la derrota de las fuerzas eritreas, que al parecer perdieron más de 300 soldados y oficiales en un reciente enfrentamiento con el TPLF. La ciudad de Shiraro es también uno de los lugares simbólicos del TPLF, que tuvo aquí una de sus bases durante la guerra del Derg y que actualmente acoge a un gran número de refugiados.
(AP/GF) (Agencia Fides 7/6/2022)
