ASIA/FILIPINAS - Un corazón camilo siempre late fuerte cuando hay sufrimiento: continúan las ayudas entre la población afectada por Odette

jueves, 20 enero 2022

Cadis

Bohol (Agencia Fides) - El tifón Rai, que azotó el país el 16 de diciembre de 2021, devastó las islas y las comunidades costeras del este de Filipinas, inundando pueblos y ciudades de todo el país (véase Agencia Fides 20/12/2021).
“Millones de personas, ya duramente afectadas por el impacto social y económico del COVID-19, se han encontrado a tener que afrontar esta supertormenta - se lee en una nota recibida en la Agencia Fides de Camillian Disaster Service International (CADIS) -. Debido a la dificultad de acceso a las comunidades afectadas, a la falta de electricidad, de Internet y de comunicación, las autoridades locales y los organismos humanitarios pertinentes no pudieron hacer una evaluación inmediata del alcance de los daños. Sin embargo, casi un mes después, junto con dos socios locales, la Sociedad de ex-seminaristas camilianos Inc. (SeCSI Bohol) y el equipo de la Unidad CTF de ExCamillian en Negros, Cadis está llevando a cabo operaciones de ayuda en las provincias de Bohol y Negros Occidental, entre las más afectadas de la región de Visayas”.
Según la información de Fides, la mayoría de los supervivientes estaban aislados y sin refugio. “El súper tifón causó grandes daños además de en vidas arebatadas, en viviendas, infraestructuras públicas y servicios eléctricos y de telecomunicaciones. Afectó a unos 7,3 millones de personas en todo el país, con unos 2,4 millones de individuos con necesidad de alimentos de emergencia, atención sanitaria, refugio y asistencia”.
Entre las zonas que CADIS sigue vigilando están las comunidades insulares y costeras de Ubay, Calape y Tubigon (Bohol) y las comunidades costeras de la diócesis de Kabankalan. Inicialmente, el objetivo era llegar a más de 5.000 familias. “El equipo de Bohol distribuyó paquetes de ayuda a 680 familias en los municipios de Ubay (comunidades de Tapon y Calangaman), Calape (islas de Panganganan y Matabao) y Tubigon. Cada paquete familiar contenía 3 kg de arroz, 3 latas de sardinas, 7 paquetes de fideos y kits de higiene, suficientes para al menos una semana. Aunque es insignificante en comparación con sus necesidades actuales, ayudará a las familias afectadas a empezar a centrarse en la recuperación de sus bienes y medios de vida”.
“En Ubay, la Operación Kabalaka del CTF está acudiendo en ayuda de los pescadores que pasaron las fiestas navideñas sin hogar y sin provisiones. Se ha llegado a 230 familias, pero se pretende llegar a otras 1.350 en los barangays de Tapon y Calangaman”.
El equipo de CTF Negros está trabajando en uno de los municipios más afectados de Cauayan Negros Occidental, concretamente en el barangay de Elihan. El grupo se formó específicamente para tratar con Odette. “La catástrofe los unió para planificar una respuesta coordinada y organizada. Entre los miembros del equipo hay un italiano, antiguo camilo, que lleva más de una década viviendo en la isla de Negros. Como dice el refrán, una fruta se reconoce por su árbol y sus raíces”, concluye Cadis. Un corazón camilo siempre late fuerte cuando hay sufrimiento”.
Odette muestra cómo el cambio climático puede ser muy destructivo, aunque sea predecible. La región geográfica de Filipinas está naturalmente predispuesta a recibir varios tifones a lo largo del año. Lo que ha cambiado drásticamente en los últimos años es la intensidad con la que estos fenómenos afectan a distintas zonas del planeta.
(AP) (Agencia Fides 20/1/2022)


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