ÁFRICA/ R.D. CONGO - 10 años después de la presentación del Informe Mapping de la ONU, las víctimas aún esperan justicia

jueves, 8 octubre 2020 grupos armados   justicia   obispos   onu  

Kinshasa (Agencia Fides) - Han pasado 10 años desde la presentación del Informe Mapping de las Naciones Unidas (véase Fides 5/7/2011), que documentó las violaciones de derechos humanos cometidas en la República Democrática del Congo entre marzo de 1993 y junio de 2003 (617 episodios documentados). Quinientas ochenta y una páginas destacan hechos, personas, lugares donde ocurrieron masacres y violencia. Y no son partes iguales, no es un todo indiferenciado donde al final todos son responsables y por tanto todos absueltos. El Informe presenta 200 nombres de personalidades destacadas involucradas en crímenes que “presentan elementos abrumadores [...] de genocidio”, cuya identidad, sin embargo, no se revela.
Con motivo del décimo aniversario de la publicación del informe, las organizaciones de la sociedad civil han organizado varias manifestaciones en todo el país, en particular en Bukavu y Kisangani, para pedir que se entablaran acciones judiciales contra los autores de los crímenes mencionados en el informe. Los representantes de la sociedad civil también piden que se esclarezca la verdad sobre lo sucedido y medidas concretas de reparación para las víctimas.
Por parte del gobierno congoleño, el Ministro de Derechos Humanos ha hecho referencia a algunos decretos en preparación, por un lado, para el establecimiento de una comisión de verdad y justicia y, por otro, para un fondo de indemnización para las víctimas.
Mientras tanto, sin embargo, la violencia continúa: el Arzobispo de Bukavu, Su Exc. Mons. François Xavier Maroy Rusengo ha lanzado un llamamiento a los grupos armados, todavía presentes en la provincia de Kivu del Sur y en toda la parte oriental de la República Democrática del Congo a ser actores de paz y no de violencia deponiendo las armas, por el desarrollo de la Región. “Cambien sus armas por la cruz de Cristo que salva al mundo”.
Ya en diciembre pasado, el arzobispo de Kinshasa, Su Eminencia el Cardenal Ambongo Besungu Fridolin, después de visitar Kivu del Norte, declaró que existen políticas internacionales que tienen como objetivo balcanizar el Congo. Y esto continuará hasta que no se de lo que la sociedad civil congoleña pide desde hace mucho: la paz y justicia. Por ello los activistas apoyan la petición del premio Nobel de la Paz Denis Mukwege, médico que atiende a las víctimas de violaciones de guerra en la región, para que “se cree un tribunal internacional para el Congo, que no debe quedar como bastión de la impunidad”.
(F.F.) (L.M.) (Agencia Fides 8/10/2020)


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