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Roma (Agencia Fides) – “La Obra de la Infancia y Adolescencia Misionera promueve la educación humana y cristiana; ayuda a los niños a desarrollar su espíritu misionero, les insta a compartir la fe y los medios materiales, especialmente con los niños más necesitados; promueve, alienta y apoya las vocaciones misioneras. Es un instrumento de crecimiento en la fe, también en una perspectiva vocacional". Así lo ha explicado la Hermana Roberta Tremarelli, AMSS, Secretaria General de la Obra Pontificia de la Infancia y Adolescencia Misionera (IAM), en la ponencia sobre la Obra presentada el 30 de mayo ante la Asamblea General de las Obras Misionales Pontificias (véase Fides 24/05/2019).
La Obra se enfrenta a varios desafíos en la actualidad, y entre ellos ha mencionado: educar a los niños y adolescentes sobre los valores; educar al compartir; promover itinerarios educativos que propongan diferentes vocaciones, incluidas vocaciones misioneras; involucrar a las familias en la animación y formación; dar continuidad al camino vivido en la infancia misionera a través de la formación de los adolescentes; integrar la dimensión misionera en el programa de educación y formación pastoral cristiana.
Luego, la hermana Roberta Tremarelli ha recordado la celebración de los 175 años de la Obra, que "ha asumido diferentes fisionomías en los distintos países, pero en casi todos hemos tratado de enfatizar este aniversario proponiéndolo como un tema común e involucrando a niños, jóvenes, maestros, catequistas, diócesis, produciendo subsidios y materiales de diversos tipos, y difundiendo las noticias también en los medios de comunicación". En cuanto al Mes Misionero Extraordinario, la Secretaría ha propuesto a cada Dirección Nacional que lance el concurso: "Bautizados y enviados: cantando la misión”, para involucrar a niños y jóvenes en esta celebración extraordinaria. "A menudo, los grandes eventos eclesiales —ha explicado la religiosa — conciernen a los adultos, y los niños no son considerados receptores directos o protagonistas, por lo que cada institución debe usar la creatividad bajo la guía del Espíritu Santo para encontrar un lugar en la Iglesia para estos muchachos".
La Secretaria General ha informado también de su participación en algunos eventos: en Suiza del 19 al 21 de enero por el 30 aniversario de los Cantores de la Estrella, en el cantón alemán; en Ruanda del 23 de febrero al 5 de marzo para la reunión continental de directores nacionales y colaboradores de las OMP; en el viaje de regreso se detendrá en Bruselas, visitando la sede de las OMP en Bélgica; el 18 de mayo en Rumania para la primera celebración de la Jornada de la Infancia Misionera. "Después de la Asamblea General y del curso para nuevos directores nacionales – ha seguido explicando la hermana– viajaré a Congo RDC para participar en tres sesiones de formación con los directores diocesanos y los animadores de la Infancia Misionera en tres provincias eclesiásticas del país".
Con respecto a la celebración de la Jornada de la Infancia Misionera y la colecta, la hermana Roberta ha destacado que a pesar de las esperanzas del Papa Pío XII, la Jornada "lamentablemente en algunos países hoy no se celebra, ya sea porque los Obispos no dan la oportunidad, ya sea porque la Dirección Nacional no lo propone", y también para realizar la colecta existen dificultades de diversa índole, a pesar de que “algunas parroquias y algunas diócesis lo realizan espontáneamente porque reconocen su fundamento misionero”.
Después de algunas aclaraciones sobre la presentación de los proyectos y la distribución de los subsidios, la hermana Roberta ha invitado a que se utilicen para las iniciativas de animación y promoción misionera de la IAM, sólo "fotos de niños en grupos, sonriendo, evitando fotos en las que los niños aparecen en condiciones indignas, sucios y hambrientos, llorando o desnudos. Nuestro propósito - ha subrayado -, no es conmover a los que ven o leen y así obtener una ofrenda, sino involucrar a los bautizados en la mision ad gentes a través de la oración y la cooperación, promoviendo el apoyo a iglesias particulares porque son miembros de un solo Cuerpo que es el de la Iglesia”.
Por último, la Secretaría Internacional de la IAM ha propuesto la santidad como un tema anual común para 2020, "un camino para implementar el don recibido en el Bautismo". "La edad no es un obstáculo para alcanzar la santidad – ha dicho para concluir la hermana Roberta -, y los niños pueden ponerlo de manifiesto con su testimonio de piedad, fidelidad y amor por Dios".
(SL) (Agencia Fides 1/06/2019)
