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Bujumbura (Agencia Fides) - Hay más de 410.000 burundeses que han huido a los países vecinos en los últimos dos años. Así lo informa el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), según el cual se prevé que este número aumentará a finales de año.
Un portavoz del organismo de la ONU también ha dicho que los refugiados afirman que están huyendo por temor a la persecución y a la violación de los derechos humanos en su país, incluida las violaciones y la violencia sexual.
Tanzania acoge a la mayoría de los refugiados de Burundi, donde 249.000 de ellos viven en tres campos muy concurridos. Decenas de miles de burundeses están en Ruanda, Uganda y la República Democrática del Congo.
La de Burundi es la tercera crisis de refugiados más grande de África, pero ACNUR sólo ha recibido el 2% de los 250 millones de dólares necesarios para su gestión. Los campos de refugiados están al límite de la capacidad, mientras que cada día llegan nuevos refugiados. Se necesita construir nuevas instalaciones y ampliar las ya existentes. La asistencia educativa para los niños es muy difícil, con clases que no tienen más espacio para los nuevos estudiantes.
Los países vecinos, en algunos casos, han comenzado a rechazar a los refugiados que llegan a la frontera.
La crisis de Burundi estalló en 2015 tras el tercer mandato del presidente Pierre Nkurunziza, en violación de la Constitución y de los Acuerdos de Paz de Arusha. Desde entonces el país vive en un estado de tensión permanente entre la violencia cometida por las milicias pro-gubernamentales y las de algunos grupos guerrilleros que se oponen al presidente. (L.M.) (Agencia Fides 26/5/2017)
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