AMERICA/PERÚ - “Nos ponemos en estado de misión con nuestras comunidades. Que en este Año de la Eucaristía el Señor Jesús se quede con nosotros para hacernos capaces de comunicarlo a nuestros hermanos": Mensaje final de la XXX Asamblea Plenaria del CELAM

sábado, 21 mayo 2005

Lima (Agencia Fides) - A. cierre de los trabajos de la XXX Asamblea Plenaria del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), desarrolla en Lima del 17 al 20 de mayo, un grupo de Obispos tuvieron una rueda de prensa en la sede central de la Conferencia Episcopal. En la ocasión se dieron a conocer algunos pasajes del Mensaje final de esta asamblea, que tiene como título significativo "Para que nuestros pueblos tengan vida". Además ha anunció que la 31ª Asamblea Ordinaria de este organismo eclesial tendrá lugar por primera vez en Cuba.
En el mensaje, los Obispos recuerdan que "al inicio de este milenio el Papa Juan Pablo II invitó a remar mar adentro y a lanzar las redes para ponerse al servicio de todas las personas en las circunstancias concretas en las que se encuentran ahora". Esta invitación ha sido lanzada de nuevo de nuevo por el Papa Benedicto XVI al inicio de su Pontificado: "También hoy se dice a la Iglesia y a los sucesores de los apóstoles que remen mar adentro en la historia y echen las redes, para conquistar a los hombres al Evangelio - a Dios, a Cristo, a la verdadera vida. … Nosotros existimos para mostrar a Dios a los hombres. Y solo allí donde se ve a Dios, empieza realmente la vida."
En esta perspectiva, el Episcopado Latinoamericano afirma con decisión su voluntad de abrazar el desafío de la evangelización: "En la Iglesia en América Latina y el Caribe, debe despertarse el anhelo de llevar el Evangelio a otros países y Continentes, a cuantos no han llegado todavía por el anuncio de Jesucristo". Por ello, los Obispos declaran: "con nuestras comunidades nos ponemos en estado de misión… Que en este Año de la Eucaristía el Señor Jesús se quede con nosotros para hacernos capaces de comunicarlo a nuestros hermanos."
En el documento también se recuerda que al inicio del tercer milenio "América Latina y el Caribe se ven desafiados con fuerza por los cambios religiosos, éticos y culturales que marcan el trabajo del nacimiento de una nueva época", y puntualizan: "Navegaremos frecuentemente contra corriente, pero con afecto hacia toda persona, creada a imagen y semejanza de Dios, que tiene sed de su paternidad, de humanidad y fraternidad". El trabajo pastoral será orientado hacia la conversión de hombres, mujeres y jóvenes cuyas convicciones vacilan, pero que buscan la libertad, el bien, la felicidad y la belleza en medio de la atracción de los medios de comunicación, que pueden ofrecerles mensajes seductores que los confunden.
En el mensaje también se pone una particular atención a los ataques contra la vida y, por tanto, el compromiso de la Iglesia latinoamericana "debe estar definitivamente marcado por la cultura de la vida: por el respecto de la vida, por la alegría de transmitir la vida, por la formación de familias cristianas que sean santuarios de la vida, para que se aseguren las condiciones sociales y legislativas que permitan a todos, especialmente a los más afligidos, pobres y marginados, llevar una vida digna de su vocación humana y cristiana." (R.Z) (Agencia Fides 21/5/2005, Líneas:37 Palabras: 549)


Compartir: