AFRICA/ETIOPIA - Etiopía decidida a enterrar el hacha de guerra, acepta la línea fronteriza con Eritrea establecida por la comisión de arbitraje internacional. Ahora le toca a Eritrea responder positivamente

viernes, 26 noviembre 2004

Addis Abeba (Agencia Fides) - “Ha prevalecido el deseo de dirigir la guerra contra el hambre y la pobreza y no una guerra real" dicen a la Agencia Fides fuentes locales de Addis Abeba comentando la decisión del gobierno etíope de aceptar en línea de principio la demarcación fronteriza con Eritrea decidida por la comisión de arbitraje independiente de La Haya en abril del 2002. El Primer Ministro etíope ha definido el trazado de la frontera como "injusta e ilegal", pero ha reafirmado que Etiopía desea solucionar los problemas con Eritrea de modo pacífico.
"Etiopía quiere cambiar de vía: ya no quiere la guerra y desea solucionar sus propios problemas de desarrollo" dicen las fuentes de Fides. "Aceptando la línea fronteriza de la comisión de arbitraje, Addis Abeba quiere conseguir el apoyo de la comunidad internacional para sus propios proyectos de desarrollo."
Pero las primeras reacciones por parte eritrea no son alentadoras: "toman tiempo... posiciones fútiles" ha declarado un portavoz del gobierno eritreo. Según observadores internacionales, la actitud eritrea deriva del aislamiento interno e internacional en el que se encuentra el gobierno del Presidente Isaias Afeworki. “De otra manera, no se comprende la posición de Eritrea, puesto que el trazado fijado por la comisión internacional favorece las tesis de Asmara más que las de Addis Abeba" dicen una fuente de Fides.
"Ahora es importante la colaboración sobre el terreno entre los dos países, que no han reanudado todavía las relaciones diplomáticas" dicen las fuentes de Fides. "La afirmación del gobierno etíope de aceptar en línea de principio la línea de frontera significa que los dos países tendrán que demarcar después técnicamente la frontera sobre el terreno. Para ello, es necesario retomar las relaciones entre los dos países y que la comunidad internacional provea un apoyo técnico a la operación."
Etiopía y Eritrea se han enfrentado en una sangrienta guerra de frontera entre e 1998 y el 2000, que provocó al menos 100.000 muertos. Las hostilidades se abandonaron en el 2000 con un acuerdo en Argel que confió a una comisión internacional independiente la demarcación de la frontera. Pero en septiembre del 2003 Addis Abeba rechazó el trazo de la comisión, bloqueando así el proceso de paz. (L.M) (Agencia Fides 26/11/2004 Líneas: 31 palabras: 395)


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