VATICANO - El Papa recibe a los participantes en la Conferencia Internacional promovida por el Pontificio Consejo para la Pastoral de la Salud: "La medicina siempre está al servicio de la vida. Incluso cuando sabe que no puede vencer una patología grave, dedica sus capacidades a aliviar parte del sufrimiento de la misma"

viernes, 12 noviembre 2004

Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) - Mientras continúan en el Vaticano los trabajos de la Conferencia Internacional promovida por el Pontificio Consejo para la Pastoral de los Agentes Sanitarios sobre el tema: "Las curas paliativas", esta mañana el Santo Padre ha recibido en audiencia en el aula Pablo VI a los participantes en la Conferencia. En su discurso el Santo Padre ha subrayado que la medicina siempre está al servicio de la vida". Como afirma la Encíclica "Evangelium vitae", las curas paliativas están "destinadas a hacer más soportable el sufrimiento en la fase final de la enfermedad y asegurarle al mismo tiempo al paciente un adecuado acompañamiento" (n. 65). El Papa continuó afirmando que las curas paliativas aspiran a aliviar, especialmente en el paciente terminal, una vasta gama de síntomas de sufrimiento de orden físico, psíquico y mental, y solicitan por tanto la intervención de un equipo de especialistas con competencia médica, psicológica y religiosa, acordes entre ellos para apoyar al paciente en la fase crítica."
Con respecto a la eutanasia, Juan Pablo II ha afirmado que "entre los dramas causados por una ética que pretende establecer quién puede vivir y quién debe morir, está la eutanasia. Aunque motivada por un sentimiento de una mal entendida compasión o de una dignidad que debe preservarse malentendida, la eutanasia en lugar de rescatar a la persona del sufrimiento realiza la supresión". El Papa también ha reafirmado que "el rechazo de un ensañamiento terapéutico no es un rechazo del paciente y de su vida."
Juan Pablo II ha concluido su discurso subrayando la importancia de la pastoral sanitaria. En efecto, "la Iglesia quiere seguir ofreciendo su propia contribución específica en el acompañamiento humano y espiritual de los pacientes". (AP) (Agencia Fides 12/11/2004; Líneas: 26 Palabras: 338)


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