VATICANO - La Iglesia nunca ha estado en contra del empleo de opiáceos para los enfermos terminales: "Tratamientos paliativas", es el tema de la XIX Conferencia Internacional del Pontificio Consejo para la Pastoral de los Agentes Sanitarios

miércoles, 10 noviembre 2004

Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) - Vuelve puntualmente la cita del Pontificio Consejo para la Pastoral de la Salud. Se abrirá mañana 11 de noviembre en el Vaticano, en el aula Nueva del Sínodo, y concluirá el próximo 13 noviembre, la XIX Conferencia Internacional promovida por el Pontificio Consejo. El tema que será afrontado por los más de 700 participantes es el de las curas paliativas.
En el curso de la Rueda de prensa de presentación, que se tuvo ayer en la Sala de Prensa Vaticana, el Cardenal Javier Lozano Barragán, Presidente del Pontificio Consejo para la Pastoral Sanitaria, empezó diciendo que "la eutanasia y el ensañamiento terapéutico no son ficciones, sino que ocurren en la cotidianidad de nuestro tiempo y solicitan una respuesta válida por parte de la Iglesia católica."
El Presidente continuó explicando que la "Conferencia se articulará en tres grandes partes: la realidad de los tratamientos paliativos en el mundo de hoy; la iluminación de estos tratamientos con el Evangelio y el diálogo interreligioso; la práctica a seguir." En su intervención, el Secretario del Pontificio Consejo para el Pastoral de la Salud, Su Exc. Mons. Redrado, insistió en la validez de la "cura integral"; mientras el Subsecretario, Padre Felice Ruffini, después de haber descrito la definición oficial que la OMS ha dado de curas paliativas (ver http://www.who.int/cancer/palliative/definition/en /) insistió en el hecho que el amor fraterno, la cercanía a los enfermos y el calor humano son las únicas curas paliativas válidas. El Padre Ruffini habló de sus experiencias personales cuando como joven Camiliano, acompañó hasta el último momento a algunos enfermos terminales que murieron serenamente gracias al calor humano recibido y como el amor total hacia el que sufre es fundamental.
Entre los otros participantes en la Conferencia, la doctora Zagonel, especialista en oncología y hematología del Hospital de los Hermanos de San Juan de Dios en la isla Tiberina de Roma, insistió en cuatro puntos principales: el reconocimiento de la medicina paliativa como una medicina general; la difusión de informaciones correctas sobre la existencia de estos tratamientos y estructuras que las llevan a la práctica; mayor investigación para el desarrollo de nuevas metodologías sobre fármacos específicos y modelos que vayan al encuentro de las exigencias de los enfermos; mayor empeño económico y financiero.
El doctor Maurizio Evangelista, investigador al instituto de Anestesia y a Terapia del dolor de la Facultad de Medicina y Cirugía de la Universidad Católica del Sagrado Corazón de Roma, recordando que la Iglesia, como declaró en 1956 el Papa Pio XII, nunca ha estado en contra del empleo de los opiáceos para los enfermos terminales, dijo que las curas paliativas siempre se dan de acuerdo con el paciente y la familia, y que el médico a un cierto punto tiene que "ceder la mano a otras figuras como la de un padre espiritual". La doctora Simona Castellano, Fisiatra en el Centro Parapléjico de Hostia (Roma), habló de las metodologías aplicadas a los pacientes. (AP) (Agencia Fides 10/11/2004; Líneas: 39 Palabras: 527)


Compartir: