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Nairobi (Agencia Fides) - "También en la cárcel se puede ser misioneros. Siempre lo repito a mis hermanos encarcelados con los que me reúno todos los jueves en el penitenciario de máxima seguridad de Kamiti" dice a la Agencia Fides el p. Eugenio Ferrari misionero de la Consolación y Director Nacional de las Obras Misionales Pontificias de Kenia. "En la cárcel se ha creado una ferviente comunidad católica. Hay catequistas, animadores y hasta un coro que canta durante la misa que celebro todos los domingos. Yo no necesito organizar la ceremonia. Son los mismos presos los que preparan los cantos, establecen los lectores y se ofrecen para el servicio litúrgico en el altar" dice el P. Ferrari, que cuenta también un episodio curioso. "En una de las últimas misas los presos cantaron una canción que no conocía. Pregunté donde la habían encontrado y me contestaron que la habían compuesto ellos mismos”.
"A los presos siempre les digo que también ellos pueden ser misioneros con la oración y ofreciendo sus sufrimientos por el bien de la Iglesia y de la humanidad. Hay personas que están detenidas desde hace más de 25 años y también a ellos les pido que ofrezcan su oración " dice el p. Herrados. "Con motivo del mes misionero les he propuesto a mis hermanos en la cárcel que recen por los misioneros. El 24 de octubre también participaron en la oración por los no cristianos, los condenados a muerte”.
"Entre los presos hay protestantes y varios musulmanes, muchos de ellos participan en la misa católica atraídos por el testimonio de fe de los católicos. En mi ministerio en la cárcel, llevo una ayuda material a todos sin distinción de creencia porque ser católicos significa ser universales" concluye el P. Ferrari. (L.M) (Agencia Fides 26/10/2004 Líneas: 22 Palabras: 304)
