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Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) - El domingo, 17 de octubre, el Santo Padre Juan Pablo II presidirá a las 17.30horas, en el altar de la Confesión de la Basílica Vaticana, la celebración de la Santa Misa a la que seguirá la adoración y Bendición con el Santísimo Sacramento, con ocasión del inicio del Año de la Eucaristía. La celebración tiene lugar en concomitancia con el Congreso Eucarístico Internacional que se cierra en Guadalajara (México) sobre el tema: "La Eucaristía, luz y vida del nuevo milenio". La celebración, presidida por el Santo Padre Juan Pablo II, prevé los siguientes momentos rituales: Santa Misa; Exposición y Adoración del Santísimo Sacramento; Mensaje del Santo Padre; Bendición Eucarística.
A su vez, la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos ha publicado un Documento titulado: "Año de la Eucaristía: Sugerencias y Propuestas" para responder a las indicaciones de la Carta Apostólica de Juan Pablo II, "Mane nobiscum Domine”. El Documento se compone de una introducción, un índice de los cinco capítulos (Cuadro de referencia; Contextos cultuales; Líneas de espiritualidad eucarística; Iniciativas y compromisos pastorales; Recorridos culturales) un elenco de los documentos citados, abreviaturas y una conclusión.
"El Año de la Eucaristía nos brinda una importante ocasión pastoral para que toda la comunidad cristiana se sensibilice para hacer de este admirable Sacrificio y Sacramento el corazón de su vida" se lee en el documento. Para el desarrollo de este Año, el Santo Padre ha dejado la iniciativa a las Iglesias particulares. Sin embargo, ha pedido a la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos que ofreciera 'sugerencias y propuestas', que pudieran ser útiles a los Pastores y trabajadores pastorales llamados a dar su contribución".
De aquí el carácter del subsidio, que se limita a dar sugerencias operativas a nivel diocesano y parroquial, entre las que destacan: preparar oportunos subsidios que den resalte al Año de la Eucaristía, que favorezcan la reflexión de sacerdotes y fieles afrontando problemáticas doctrinales y también pastorales más urgentes en sus países (falta de sacerdotes, pérdida de fervor en algunos sacerdotes con respecto a la importancia de la Misa diaria, desafección hacia la Misa dominical, abandono del culto eucarístico,; promover Congresos eucarísticos nacionales e invitar a las Universidad, Facultades, Institutos de estudio y Seminarios a profundizar en el tema,. En cuanto a las Diócesis, hay que promover el conocimiento de los Santos y Santas, especialmente si se han distinguido de forma especial por su amor a la Eucarística. Incrementar la adoración perpetua del Santísimo Sacramento señalando algunas iglesias y capillas aptas para este fin, recordar la existencia de las mismas dónde ya existan, procurando que estén abiertas sobre todo durante las principales horas del día. Por último abrir firmas de interés eucarístico en semanales, revistas diocesanas, sitios Internet, emisoras de radio y televisión locales. (S.L) (Agencia Fides 15/10/2004; Líneas: 37 Palabras: 500)
