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Kinshasa (Agencia Fides) - "¿Por qué seguir haciendo tanto mal al prójimo, al propio vecino?” Es la pregunta de Mons. Simón Ntamwana, Arzobispo de Gitega (Burundi), que puede resumir el sentido de la 8° Asamblea de la Asociación de las Conferencias Episcopales de África Central (ACEAC) realizada en Kinshasa (capital de la República Democrática de Congo) del 5 al 7 de julio.
En la reunión han participado los Obispos de los países de la región de los Grandes Lagos (RDC, Rwanda, Burundi). "Tenemos que animar a los grupos que combaten y que ponen en peligro la paz en la región, a sentarse a la mesa de negociaciones para que se ponga fin a la violencia de una vez por todas” ha afirmado Mons. Ntamwana, que es también el segundo vicedirector del ACERAC.
Los Obispos de los tres países se han comprometido a ayudar el proceso de paz en la región, aportando su contribución a la conferencia de paz regional que se tendrá en noviembre de este año.
Según Mons. Laurent Monsengwo Pasinya, Arzobispo de Kisangani y Presidente de la Conferencia Episcopal congoleña, las guerras que afligen la región no son queridas por los pueblos: "La guerra ha sido instrumentalizada por algunas personas interesadas tan solo en el poder. No hay una guerra entre los pueblos de Congo, Rwanda y Burundi". El Arzobispo de Kisangani ha añadido: "La Iglesia desea el bienestar de la población. Por esto, tiene en gran consideración la conferencia sobre la región de los Grandes Lagos, en curso de preparación". (L.M) (Agencia Fides 8//7/2004 Líneas: 19 Palabras: 280)
