Organo de informacion de las Obras Misionales Pontificias desde 1927
Santo Tomé (Agencia Fides) – “La Iglesia, sin olvidar el papel de los Estados, los Gobiernos y las diversas instituciones que trabajan en el ámbito social, debe asumir, con libertad y valentía, su función profética de anunciar el Evangelio y denunciar la injusticia. La Iglesia no debe tener miedo de evangelizar, y esta misión significa: el anuncio, el testimonio de vida y de comunión, el diálogo y la colaboración con los demás y el servicio generoso a todos, dando prioridad a los más necesitados”. Está escrito en el Documento Final del IX Encuentro de las Conferencias Episcopales de los países de habla portuguesa que se celebró en Santo Tomé del 2 al 9 de julio (ver Fides 03/07/2010).
“Al final de la reunión, todos coincidieron en que ha sido una semana muy enriquecedora, con la esperanza de que se puedan seguir realizando estos eventos como una forma de profundizar en nuestras relaciones y compartir la vida y la fe” Así Su Excelencia Mons. Manuel Antonio Santos, CMF, Obispo de Santo Tomé y Príncipe, resume para la Agencia Fides sus impresiones sobre el encuentro que se ha organizó en Santo Tomé. “En Santo Tomé y Príncipe, una pequeña isla situada en el Golfo de Guinea, se ha celebrado el noveno Encuentro de los Obispos de habla portuguesa - recuerda Mons. Santos -. Es un evento que sucede cada dos años en los países miembros de la Comunidad de Países de Lengua Portuguesa - CPLP. Asistieron a la reunión los Obispos representantes de Angola, Brasil, Cabo Verde, Guinea-Bissau, Mozambique, Portugal, Santo Tomé y Príncipe”.
El tema del encuentro ha sido “La Iglesia en la lucha contra la pobreza y la exclusión social”. “Un tema muy apropiado para la realidad existente en la nación de Santo Tomé y Príncipe - subraya el Obispo -. Durante una semana, los participantes han podido confrontarse con la realidad social del país: visitando algunos lugares importantes, encontrando a los diferentes grupos étnicos, compartiendo sus ideas con las fuerzas vivas locales, participando en las celebraciones litúrgicas especialmente preparadas para esta ocasión...”. Mons. Manuel Antonio Santos, del documento final, del cual ha enviado una copia a Fides, destaca un párrafo que puede considerarse como el resumen de la semana de trabajo y las indicaciones para el trabajo futuro: “Para tener menos pobreza y más desarrollo, entre otras cosas, es indispensable tomar medidas relativas a la puesta en común de la tierra y de la distribución de la riqueza, por no hablar de la lucha contra la corrupción y la promoción del trabajo digno. Las tareas prioritarias se centran en la educación, en el invertir en la promoción de la justicia y la formación profesional y en el desarrollo de los servicios sanitarios. En sus actividades educativas y sociales, la Iglesia tiene el derecho de usufructuar, a la par con otras instituciones civiles, de los recursos existentes para estos fines”.
En el comunicado final también se destaca la calida acogida a los participantes del Encuentro mostrada por las comunidades religiosas y las parroquias de Santo Tomé y Príncipe, especialmente durante las celebraciones eucarísticas, con mucha participación y alegría. En la Reunión con el Presidente de la República y el Primer Ministro, las Autoridades resaltaron su aprecio por las acciones de la Iglesia Católica en el archipiélago, tanto en el campo religioso como en la acción social y como elemento pacificador.
El tema del Encuentro, en consonancia con el Año Internacional de la lucha contra la pobreza y la exclusión social, ha sido ampliamente debatido, teniendo en cuenta las diferentes situaciones de los países de habla portuguesa. Entre las observaciones citadas en el documento final, se recuerda que todavía estamos lejos de alcanzar los objetivos del Milenio, mientras que la brecha entre ricos y pobres ha aumentado. Se pide, en particular a los líderes de la UE que cumplan su compromiso de destinar el 0,7% del ingreso nacional para la ayuda publica para el desarrollo.
Como parte de la celebración del 35 aniversario de la independencia de varios países de habla portuguesa, el documento invita a los católicos a participar más activamente y con responsabilidad, “a la construcción de una sociedad justa y fraterna”. La Iglesia posee un rico patrimonio de doctrina social que debe explorar y presentar, dentro y fuera de sus fronteras. (SL) (Agencia Fides 20/7/2010)
