VATICANO - EL PAPA EN LA AUDIENCIA GENERAL: “EL SENTIDO DE LA ESPERANZA CRISTIANA, REPLANTEADA POR EL ADVIENTO, ES EL DE LA ESPERA CONFIADA, EL DE LA DISPONIBILIDAD OPERANTE Y DE LA APERTURA GOZOSA AL ENCUENTRO CON EL SEÑOR. EN BELÉN, VINO PARA QUEDARSE CON NOSOTROS PARA SIEMPRE”.

miércoles, 17 diciembre 2003

Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) – “El Adviento mantiene viva la espera de Cristo, que vendrá para visitarnos con su salvación, realizando plenamente su Reino de justicia y de paz. La evocación anual del nacimiento del Mesías en Belén renueva en el corazón de los creyentes la certeza de que Dios es fiel a sus promesas. El Adviento es, por tanto, un poderoso anuncio de esperanza que afecta en profundidad a nuestra experiencia personal y comunitaria”. En su discurso en al audiencia general de hoy, 17 de diciembre, el Santo Padre ha hablado del Adviento y del misterio de la Navidad ya tan próximo.
Además de la esperanza de un mundo más justo y solidario, el Adviento pone de relieve un segundo elemento referente al significado y al valor de la existencia. “Con frecuencia nos preguntamos: ¿quién somos?, ¿adónde vamos?, ¿qué sentido tiene lo que hacemos en la tierra? ¿qué nos espera tras la muerte?” ha dicho el Papa. Ciertamente el alcanzar el bienestar económico o ciertas metas sociales y científicas cada vez más grandes no satisface las aspiraciones más profundas de nuestro espíritu: “La liturgia de hoy nos invita a ampliar el alcance de nuestra mirada y a contemplar la Sabiduría de Dios que surge del Altísima y es capaz de abarcar los confines del mundo”.
Un tercer elemento característico de la esperanza cristiana está en el hecho de que El Adviento y sobre todo la Navidad recuerdan al hombre, que es Dios quien ha tomado la iniciativa de salir a su encuentro: Jesús asumió nuestra naturaleza y estableció su alianza con toda la humanidad para siempre. “Podemos, por tanto, decir al concluir que el sentido de la esperanza cristiana, replanteada por el Adviento, es el de la espera confiada, el de la disponibilidad operante y de la apertura gozosa al encuentro con el Señor. En Belén, vino para quedarse con nosotros para siempre”.
(SL) (Agencia Fides 17/12/2003 Líneas: 32 Palabras: 375)


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