VATICANO - EL PAPA AL NUEVO PATRIARCA DE BABILONIA DE LOS CALDEOS: “LA CONCORDIA ES SUMAMENTE NECESARIA AL CONTEMPLAR VUESTRA TIERRA, HOY MÁS NECESITADA QUE NUNCA DE VERDADERA PAZ Y DE TRANQUILIDAD EN EL ORDEN. TRABAJAD PARA "UNIR LAS FUERZAS" DE TODOS LOS CREYENTES EN UN RESPETUOSO DIÁLOGO, QUE FAVOREZCA EN TODOS LOS NIVELES LA CONSTRUCCIÓN DE UNA SOCIEDAD ESTABLE Y LIBRE”

viernes, 5 diciembre 2003

Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) – En la tarde del miércoles 3 de diciembre, el Santo Padre Juan Pablo II recibió en audiencia al nuevo Patriarca de Babilonia de los Caldeos, Su Beatitud, Mons. Emmanuel Karim Delly, junto a miembros del Sínodo de la Iglesia Caldea. En el discurso pronunciado, el Santo Padre ha dirigido su afectuoso saludo a todos los presentes “reunidos en San Pedro para realizar el acto más alto de la responsabilidad sinodal” y les pidió “llevar a las comunidades de las que son Pastores su afectuoso recuerdo y la seguridad de su oración. El Papa esta cercano a todos los iraquíes y conoce sus aspiraciones por la paz, la seguridad y la libertad”.
El Papa recordó después que “la Iglesia Caldea es fiel testimonio de Cristo en la tierra de la que partió Abraham, nuestro Padre en la fe y tiene sus orígenes en la predicación apostólica de Tomás, uno de los doce”. Participando en la savia vital que mana de Cristo, debe seguir floreciendo, fiel a su propia identidad, dando frutos abundantes para el bien de todo el cuerpo eclesial”. Después exhortó a los Obispos a desarrollar cada vez mas un clima de unidad de propósitos para alcanzar el “pleno desarrollo de la vida eclesial”. Además, Juan Pablo II, subrayó que “la concordia es sumamente necesaria al contemplar vuestra tierra, hoy más necesitada que nunca de verdadera paz y de tranquilidad en el orden. Trabajad para "unir las fuerzas" de todos los creyentes en un respetuoso diálogo, que favorezca en todos los niveles la construcción de una sociedad estable y libre”.
El nuevo patriarca, después de su elección pidió al Santo Padre la «comunión eclesial», expresando al Papa en la carta de petición “ toda mi cercanía y la de la Iglesia Caldea y mi devoción. Buscaré con la ayuda de Dios hacer lo posible por la unidad de la Iglesia en esta trágica situación en la que se encuentra Oriente Medio y, en particular, Irak”. El Santo Padre Juan Pablo II concediendo la petición de comunión eclesial, expresó su deseo de que “El Señor, Pastor de pastores, le colme de su gracia para que pueda desarrollar su nuevo ministerio para la gloria de Dios, el consuelo de todos los que han sido confiados a su paternal solicitud y por el bien de la Iglesia universal”.
(SL) (Agencia Fides 5/12/2003 Líneas: 35 Palabras: 470)


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