VATICANO - EL PAPA EN LA AUDIENCIA GENERAL. EL MODELO DE VIDA DEL HOMBRE POLITICO DEBERIA SER “EL ACTUAR DIVINO EN EL GOBIERNO DEL MUNDO”

viernes, 2 mayo 2003

Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) - Después de la catequesis dedicada al significado de las Celebraciones pascuales, en la audiencia general del miércoles 30 de abril, el Santo Padre, Juan Pablo II, reemprendió la reflexión sobre los salmos de la Liturgia de Laúdes, centrándose en el salmo 100.
Este salmo presenta “una meditación que pinta el retrato de un hombre político ideal” dijo el Papa, “un modelo de vida debería ser el actuar divino en el gobierno del mundo: una actuar recto de una perfecta integridad moral y de un enérgico empeño contra la injusticia. Este texto viene propuesto como programa de vida para el fiel que inicia su jornada de trabajo y de relación con el prójimo. Es un programa de “amor y justicia” que se articula en dos grandes líneas morales. La primera es llamada “vía de la inocencia” y es orientada a exaltar las elecciones personales de vida hechas “con corazón íntegro”,esto con perfecta rectitud de conciencia... La segunda línea es desarrollada en la parte final del salmo y precisa la importancia de las dotes más típicamente públicas y sociales. También en este caso se enumeran los puntos esenciales de una vida que rechazar el mal con rigor y firmeza”.
El último verso del salmo afirma: «Exterminaré cada mañana a todos los impíos del país para extirpar de la ciudad del Señor a cuantos realizan el mal». Y el Santo Padre explicó que “quien así habla no es un individuo cualquiera sino el rey supremo, responsable de la justicia en el país. Con esta frase expresa de modo hiperbólico su implacable empeño de lucha contra la criminalidad, un empeño necesario, compartido por todos aquellos que tienen la responsabilidad en la gestión pública. ¡Evidentemente este cometido de imponer la justicia no corresponde a cualquier ciudadano! Por ello, si un simple fiel quiere aplicarse la frase del salmo lo debe hacer en sentido analógico, comprometiéndose a extirpar cada mañana de su propio corazón y su propia conducta la raíz mala de la corrupción y la violencia, de la perversión y la maldad así como toda forma de egoísmo e injusticia”. (S.L.) (Agencia Fides 2/5/2003 Líneas: 30 Palabras: 389)


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